Con motivo del lanzamiento más esperado del año, las Air Vapormax, Nike co-creó juntó a Fuerza Bruta – la compañía que ya fascinó a más de 5 millones de personas alrededor del mundo por sus performances únicas en las que brindan una experiencia de teatro dinámica-, un show inspirado en tecnología, movimiento y, sobre todo, el aire: motor que propulsa e impulsa a desafiar los límites.
Hace ya 2 semanas Nike presentó en Argentina, las zapatillas más esperadas por miles de fanáticos, las Nike Air VaporMax: más aire, más tecnología, más diseño y más running, para motivarte a alcanzar tus metas y descubrir tus pasiones. Este arribo se hizo en el marco de una campaña súper poderosa que tiene a figuras de su talla: Lali Espósito, Evelina Cabrera y Paula Pareto, quienes no dudan en incorporar el Running y la fuerza del aire en sus rutinas diarias para llegar más lejos.
¿Y qué mejor manera de celebrar este evento que con un show de máxima potencia? Por eso, se llevó a cabo esta fusión entre la compañía de teatro y la marca, que trae a la vida los conceptos más inspiradores de la campaña.
Desde un principio, el show invitó a los asistentes a vivir la fuerza del aire fusionado con el movimiento, gracias a una experiencia interactiva con performances únicas que los recibía y motivaba a participar.
El show especial de Nike y Fuerza Bruta contó con la presencia de varios invitados. Las protagonistas de la campaña Lali Espósito, Evelina Cabrera y Paula Pareto estuvieron presentes. Además, participaron reconocidos atletas del mundo Nike como Facundo Campazzo, Juani Hernández, Nicolás Laprovitola y Celina Disanto, como también figuras del mundo del espectáculo: Angela Torres, Santi Artemis, Cata Bonadeo, Jowy Roman, Juan Marconi, Luz Cipriota entre otros.
El DJ Tommy Muñoz y la actriz Cande Molfese, tampoco quisieron perderse el show; pero ellos decidieron llegar, fiel a su espíritu runner, corriendo. Acompañados cada uno por una crew de corredores arribaron al lugar de la función con la energía en lo más alto, listos para continuar saltando y bailando al ritmo de Fuerza Bruta. Sin dudas se vivió un show único que invitó a todos a experimentar una sensibilidad colectiva, universal, sin traducción, ni anestesia… en una jornada brutalmente feliz,
